jueves, 16 de marzo de 2017

El Abuelo

Otro miércoles! vamos ahí!

La tarde no podía empezar mejor. Un sol de justicia y habíamos sido citados para el poteo en uno de los lugares más bonitos de nuestra querida city, la plaza de la catedral de Sta María. Hasta hace un tiempo era un espacio anulado por los andamios de las infinitas obras de la catedral, pero, una vez retirados, ha quedado un espacio abierto con preciosas vistas a la torre. Así que disfrutamos de un gran poteo al aire libre en la terraza del Querida María, donde premiamos al ganador de La Caña Justa!



De ahí nos dirigimos al bar que Markitx nos había gestionado para cenar, el Abuelo. Situado en la Zapa junto a antros de nuestro pasado como el 5-50.

Pequeñito, acogedor... bien. Mientras esperamos a que salgan nuestras raciones, nuestro Community Manager nos comenta como la fama nos está superando. Mientras nuestro Community Manager nos comenta como la fama nos está superando, el goteo de followers no para. Según estadísticas ,habíamos subido no se si un 50% el número de followers esa semana. Fijo que CR no puede decir lo mismo.

Por fin llega nuestra comida. Empezamos con una buena tabla de embutidos, algo que con nosotros es victoria segura.

Para continuar, unas puntillitas (cuánto daño nos ha hecho Conil) y chorizo a la sidra. A este último, Markitx y yo le pedíamos más potencia, sabía poco a sidra... aunque no estaba mal tampoco. Con este plato llegaron las primeras broncas a Tobi por su manía de tirar cachos de pan a nadar en la cazuelita...


Después salieron unos callos. Los callos tenían una nota de 8,125. Sí, si nosotros decimos que la nota es 8,125, lo es y punto. Porque comemos callos 5 miércoles de cada 4. Nadie sabe más de callos, siempre hablando de gastronomía (y los mejores son los del D3 de largo! los gastronómicos... los de otro tipo tenéis buenos en Logroño y Burgos).


















Para acabar nos comimos unas croquetas que estaban bastante buenas y un par de entrecots a compartir. En mi opinión estaban demasiado crudos... eso sí, los pedrolos de sal que traían hicieron gozar al público en general y a Markes en particular. Ya conocéis nuestra enfermedad con la sal...


Y así acabó otro miércoles más. Un buen bar para cenar, bien situado si después quieres jaleo, aunque sin llegar a entrar en el grupo TOP en mi opinión. Tras una charla en la que nos dimos cuenta de que empezamos a ser demasiado viejos para lo que nos gusta hacer con la excepción de Aaron que es demasiado joven... todos pa casa! Mañana jueves, luego viernes... pfff que pereza!




PD: agradecimientos desde aquí a nuestro follower @afisicosgames por las fotos que se ha currado para nuestro blog y Twitter.

Javicii.

No hay comentarios:

Publicar un comentario